martes, 25 de diciembre de 2012

Sin palabras...



Y de repente me he quedado sin palabras...
No sé bien qué escribir... A veces siento que esta búsqueda se vuelve monótona. Me cansa.
Y sin embargo, convive conmigo día a día, no puedo abandonarla. No puedo resignarme.
Mi cabeza y mi corazón intentan rearmar la historia, completarla. Y no lo logran. Información dispersa e inconexa, que me confunde.
En este 2012 no hubo datos nuevos que puedan ayudarme. Golpeé puertas que se abrieron pero detrás... no había nada.
Nadie sabe. Nadie escuchó... o nadie tiene memoria. Y eso duele.
Y el tiempo pasa...
En esta Navidad me encontré pensando en las navidades de mi infancia... Es cierto que cuando uno tiene hijos vuelve a rememorar aquellas viejas épocas. Aquellos tesoros que se llevan muy adentro.
Cada uno de esos momentos fue un refugio para mí al crecer.
El amor es un refugio. Lo sigue siendo.
La familia que tengo es un refugio.
Que esta Navidad y el próximo Año Nuevo traiga a sus corazones lo mejor y sobre todo la fortaleza del afecto. De querer y ser queridos.
Y para quienes están en la búsqueda como yo... que este 2013 sea un año de verdad. No se queden solos e intenten siempre darle lugar a la alegría. Aunque por momentos sea difícil...
 
Iluminada por el suave centelleo de luces navideñas, duerme mi niña. Ella es milagro, como cada uno de mis hijos.
Ahí está la maravilla de la vida.
Siempre.
A pesar de todo.



sábado, 15 de diciembre de 2012

Concientizar y transformar



El jueves pasado tuve el placer de poder concurrir a ver la obra teatral que mencioné en un post anterior "Una Azucena para Verónica".
La obra trata sobre la búsqueda de una joven que fue entregada en adopción por sus abuelos biológicos, el recorrido que ella realiza para llegar a conocer su origen. Esta vez, se presentaba en la Red de Magos Solidarios: www.redmaso.com.ar (del cual dejo el link para que puedan conocer lo que hacen, que es maravilloso).

La obra me gustó mucho. Muy intimista. Muy bien actuada (interpretada por Juan Carlos Pisano -quien es también el Autor- e Inés Principi). Fue un momento lindo de compartir y mientras la miraba pensaba qué importante es tener lugares para concientizar. Para concientizar sobre estos temas tan callados, temas tabú, que aún hoy en muchas familias se transitan en silencio, cumpliendo pactos que tanto daño hacen.
 
Importante para concientizar sobre la necesidad de quienes hemos sido adoptados/apropiados de poner en palabras, de poder decir y que nos digan. De no ser considerados como ingratos, o injustos, o desleales a nuestros padres de crianza por querer saber de dónde venimos, a quién nos parecemos, qué enfermedades futuras podríamos tener. La necesidad de conocer nuestras raíces y poder pararnos más firmes en el mundo. Y así... transformar. Transformar lo que nos tocó para bien y seguir adelante.
Al terminar la obra Juan Carlos solicitó la opinión de los presentes sobre lo que habían visto... y esto me pareció genial. Un espacio para construir. Mencionó entonces la página de Hijos Biológicos Buscamos Identidad Argentina (página en FB en la que colaboro para la difusión de historias de búsqueda) y me invitaron a contar de qué se trata... Realmente, creo que fue enriquecedor (sobre todo para mí que fue la primera vez que ante gente desconocida me animé a tener voz). Pude explicar de qué se trata, por qué buscamos y que somos muchos en este camino incierto en la búsqueda de la verdad.
Agradezco la oportunidad y animo a todos los que tienen que ver con el mundo de la adopción y personas en general a ver la obra. Esta obra se presenta en Clubes Barriales, Colegios (para mayores de 16 años), Instituciones que así lo deseen. Si cuentan con un espacio pueden contactar a Juan Carlos Pisano en Facebook o por mail a jcpisano@gmail.com para esta obra llegue a su barrio, localidad, ciudad o provincia.
Porque hablar hace bien, las palabras crean, y concientizar transforma nuestra sociedad en un lugar más justo y más empático donde vivir. Hagámoslo posible.